Más allá del camino de baldosas amarillas: Transformando la educación a través del aprendizaje basado en proyectos en Avante Global School de Cartagena
Mi proyecto de vida. Esta es una expresión común en Colombia para describir el proyecto de vida: los planes, metas y aspiraciones de una persona. En Avante Global School de Cartagena, empoderamos a los estudiantes para que encuentren su propósito, inspiren a otros y transformen la sociedad a través del aprendizaje basado en proyectos (PBL, por sus siglas en inglés). He tenido la fortuna de servir como Directora de Avante desde julio de 2024. Cuando acepté este cargo, pensé: “Puedo liderar una escuela de PBL; ya he trabajado con PBL antes y he formado a otros en esta metodología”. Sin embargo, pronto me di cuenta de que lo que había hecho eran proyectos, pero no necesariamente aprendizaje basado en proyectos. No todo proyecto es PBL. No se “hace” PBL; se vive, se respira y se fomenta el crecimiento de los estudiantes a través de ello… tal como en la vida misma.
He trabajado en siete colegios durante mis más de veinte años en educación. En cada uno, hemos diseñado experiencias de aprendizaje y currículos para preparar a los estudiantes para el siglo XXI. Sin embargo, muchos de estos colegios eran tradicionales. Existe una gran diferencia entre un colegio que implementa algunos proyectos de PBL y un colegio que está completamente basado en PBL.
Para entender mejor esta diferencia, podemos pensar en El Mago de Oz. Los colegios tradicionales son como el Camino de Baldosas Amarillas: los estudiantes siguen una ruta predeterminada establecida por el “mago” (el currículo), con poca o ninguna posibilidad de desviarse del camino prescrito. El enfoque está en llegar al objetivo final (la graduación) más que en el viaje en sí. Puede haber desafíos o proyectos aislados en el camino, pero no necesariamente ofrecen una experiencia que valore a los estudiantes como individuos o los prepare para su proyecto de vida.
En cambio, nuestro innovador colegio basado en PBL es más parecido a la aventura de Dorothy en Oz. Los estudiantes son agentes de su propio aprendizaje y se les anima a explorar más allá del camino predeterminado, enfrentándose a diversos desafíos y colaborando con otros para encontrar soluciones creativas. El viaje está lleno de experiencias de aprendizaje que promueven el crecimiento personal, fomentan el pensamiento crítico y permiten que los estudiantes descubran sus fortalezas y áreas de mejora, preparándolos para su proyecto de vida individual.
Un único proyecto en una clase no es PBL verdadero. Es como tomar un desvío del Camino de Baldosas Amarillas: un proyecto aislado que podría ser transdisciplinario. Sin embargo, una vez terminado, los estudiantes regresan al camino rígido que establece el “mago”. Así como el viaje de Dorothy trata de algo más que solo llegar a la Ciudad Esmeralda, los colegios verdaderamente basados en PBL, como Avante, se centran en una exploración continua. Aquí, los estudiantes no solo completan tareas aisladas, sino que están activamente involucrados en una experiencia de aprendizaje dinámica y en constante evolución que da forma a su camino hacia su proyecto de vida.
Beyond the Yellow Brick Road: Transforming Education Through Project-Based Learning
My life project. This is a common expression used in Colombia to describe one’s life project: their plans, goals, and aspirations. At Avante Global School, we empower students to find their purpose, inspire others, and transform society through project-based learning. I’ve been fortunate to serve as the Head of Avante since July 2024. When I accepted this position, I thought, “I can lead a PBL school; I’ve done PBL before and trained others in it.” However, I quickly realized that I had “done” projects and called them project-based learning. Not every project is PBL. You don’t “do PBL”; you live it, breathe it, and foster the growth of students through it… just like life.
I have worked in seven schools over my twenty-plus years in education. In each school, we have designed learning experiences and curricula to prepare our students for the 21st century. However, many of those schools were traditional. There is a major difference between a school who develops a few PBL projects and a PBL school. When comparing traditional schools that have a few PBL projects and a PBL school one can further understand the differences by thinking of the Wizard of Oz. Traditional schools are like the Yellow Brick Road: students follow a predetermined path set by the “wizard” (the curriculum) with little to no veering from the prescribed path. The focus is on reaching the end goal (graduation) rather than the journey itself. There may be isolated challenges or projects along the way, but they don’t necessarily provide an experience that values students as individuals or prepares them for their life project.
In contrast, our innovative PBL school is more like Dorothy’s adventure in Oz. Students are agents of their own learning and are encouraged to explore off the predetermined path, encountering diverse challenges and collaborating with others to find creative solutions. The journey is filled with learning experiences that promote personal growth, foster critical thinking, and allow students to discover their strengths and areas for growth, preparing them for their individual life project.
A single project in one class is not true PBL. It’s like taking a detour off the Yellow Brick Road — an isolated project that might be transdisciplinary in nature. However, once it’s over, students return to the familiar, rigid path the “wizard” sets. Just as Dorothy’s journey is about more than just reaching the Emerald City, true PBL schools like Avante are about continuous exploration, where students aren’t just completing isolated tasks but are actively engaged in a dynamic, ever-evolving learning experience that shapes their journey toward their life project.
Conoce el proyecto del Avante Global School en el portal de Los Mejores Colegios.
